Testimonios:

Conocí a la Dra. Angela Olaru por que trabajo al lado de su consulta.

Algunos de mis pacientes y colegas ya habían pasado por sus manos y estaban encantados.

Además, a menudo veía pasar a su consulta a jugadores famosos de fútbol, de básquet y corredores de motos, etc.

Entonces me dije a mi mismo, si aquí vienen los mejores deportistas de elite, tendré que probar.

La verdad que desde mi primera consulta me impresionó la calidad de su protocolo diagnóstico terapéutico. Ocasionalmente había pasado por las manos de otros terapeutas que usan manipulaciones. Simplemente no hay comparación.

Desde entonces han pasado unos cinco años y vengo asiduamente, para que me equilibre la columna y para que me reestructure en un sentido holístico, que va desde mi alimentación hasta las posturas del sueño y el estado emocional.

La recomiendo a todos.

Angela, aparte de ser una buena amiga, es una gran profesional.

Es mi doctora de referencia en la patología y mantenimiento de la columna vertebral.

Te mira la espalda y te descubre mil aspectos de tu vida que a veces ni tú conoces.

Su visión global de la persona y su empatía que la hacen única y excelente.

Lo que más me llamó la atención al hablar con Ángela en la primera entrevista fue la visión que tenía del paciente en su «totalidad», dando una gran importancia y en igual proporción a su alimentación, al tratamiento de la columna, al tipo y frecuencia de ejercicio físico que realice y a su estado emocional. Dando siempre al paciente unas pautas escritas de alimentación y ejercicio físico que a ella le parecen más recomendables.

Con su tratamiento, la quiropráctica, empecé a sentirme muy bien en todos los sentidos y decidí llevar también a mis hijos para que les controlara el crecimiento y desarrollo.

Todos estamos encantados de haber tenido la posibilidad de conocerla y estar en sus manos siempre que la necesitamos.

¡Gracias Ángela!

Conocí a la Dra. Angela Olaru durante una conferencia que dio en Futursalut en 2003.

Acudí a su consulta porque tenía dolores de espalda.

Mi experiencia fue muy positiva. Aprendí a escuchar mi cuerpo. No solo desaparecieron los dolores, toda mi vida cambió. La quiropráctica me inició en mi camino espiritual.

Lo recomiendo a todos.

Tengo una escoliosis con desviación de columna muy avanzada.

De joven me dijeron que era para operar pero, por suerte, no me deje convencer. Hice y continúo haciendo gimnasia cada día.

Vine a visitarme con la Dra. Angela Olaru hace unos ocho años, por recomendación de mi hijo.

Mi experiencia con la quiropráctica fue fabulosa. Mejoré mucho. De hecho me siento cada día mejor. Además de los ajustes vertebrales periódicos, la doctora y su equipo me enseñaron nuevos ejercicios que hago a diario.

Lo recomiendo a todo el mundo. Me costó bastante convencer a mi esposo, Albert Calzada. Ahora es uno de los más agradecidos pacientes de la doctora Angela.

Hace ocho años vine a visitarme con la Dra. Angela Olaru porque me habían diagnosticado una escoliosis y cifosis. Mi experiencia fue muy buena.

La cifosis desapareció y la escoliosis mejoró muchísimo.

Además durante todos estos años mantuve una salud integral perfecta. No hay nada mejor que sentirse a 100%.

Aprendí que hay que cuidarse de manera continua, que no hay nada más importante que la salud y que a veces aunque no tengamos síntomas no estamos tan bien como pensamos. Por esto es importante hacerse revisiones regularmente.

Recomiendo el cuidado quiropráctico a todos.

Empecé a tener síntomas en las vías respiratorias cuando era pequeño. Un simple resfriado se convertía en un exceso de mucosidad que acababa en infección vírica y más tarde se convirtió en rinitis alérgica. Era muy molesto porque me impedía respirar bien y me hicieron pruebas para averiguar la causa. Tenía alergia a los hongos de la humedad.

Me trataron con fármacos, probé la homeopatía…, pero los síntomas persistían e incluso se agravaron cuando tuve ataques de asma. La crisis empezaba con un empeoramiento progresivo de la falta de aire y acababa en urgencias donde me ponían una mascarilla con un broncodilatador para abrir y relajar las vías respiratorias.

El tratamiento para controlar el asma era utilizar inhaladores y fármacos y a la vez iniciar unas pruebas para hacer una vacuna específica para mí.

Conocí a la Dra. Olaru a través de mi madre y empecé el tratamiento quiropráctico. Ya en las primeras sesiones noté que respiraba mucho mejor y mi sorpresa fue que las crisis de asma desaparecieron. Y ahora sigo asistiendo porque sé cuándo necesito un ajuste para que mi cuerpo funcione correctamente.

Una lesión de cuello por un leve accidente de circulación y una buena recomendación me acercaron a la consulta de la Dra. Olaru.

Al inicio asistía yo a la consulta por mi caso en concreto, tenía mucho dolor cervical. Después aprendí que la quiropráctica va más allá de una lesión puntual. Así se fueron incorporando todos los miembros de la familia. Con ella hemos aprendido la importancia de un buen cuidado de la columna vertebral, de nuestra alimentación y del equilibrio emocional. Aprendes que muchas de las subluxaciones que van apareciendo, tienen tanto un origen físico como por ejemplo, levantar pesos con malas posturas, sentarse mal o caídas sin importancia, como un origen emocional o psicológico, que hace que estemos en tensión y que construyamos nuestra propia armadura de defensa, generando pequeñas lesiones. El tratamiento que recibes es integral, de la persona, teniendo en cuenta cuerpo y el alma.

Estamos en manos de la Dra. Olaru desde el año 2004, y con ella hemos vivido las distintas etapas de la familia. Desde la escoliosis del mayor o el último embarazo, hasta el tratamiento del más pequeño de la familia. Muchas gracias Ángela y a todo el personal de la consulta por cuidar de nuestra salud y habernos enseñado a cuidarla.

Conocí la quiropráctica por recomendación de mi ginecóloga.

Tenía un fortísimo dolor de espalda y sobre todo de cadera.

Los fármacos antiinflamatorios no me ayudaban nada. Había consultado varios médicos especialistas en columna y, según ellos, se trataba de una estenosis degenerativa del canal vertebral lumbar, que comprimía la medula espinal. La única solución era operar para descomprimir. El dolor me torturaba, pero la idea de pasar por una intervención de columna no me hacía ninguna gracia, sobre todo sabiendo que el cirujano no me daba ninguna garantía.

Era justo antes de las vacaciones de verano y estaba desesperada porqué sabía que iba pasar un agosto muy malo.

Afortunadamente tenía cita con mi ginecóloga, que me hablo de la Dra. Angela Olaru. Vine hacerme una visita y empecé un tratamiento intensivo con ella y su equipo. Para decirlo en una palabra, mi experiencia fue “INCREIBLE”. El dolor empezó a ceder y, poco a poco me puse bien sin necesidad de tomar fármacos.

Aprendí que siempre es mejor solucionar el origen del problema en lugar de tratar los síntomas.

También aprendí beber más agua, hacer ejercicios específicos, no tomar fármacos, cuidar la postura, básicamente escuchar el cuerpo.

Sin ninguna duda recomiendo la quiropráctica a todo el mundo.

Aquí esta nuestra familia padres, hijos, nietos.

Conocimos a la Dra Angela Olaru a través de un amigo hace unos 5 años.

Luis llevaba muchos años con dolor de espalda y cervicales con vértigos y ningún médico le encontraba la solución.

Pero…………… apareció un ángel nunca mejor dicho.

La Dra. Angela Olaru con sus técnicas únicas le curo y la vida de Luis es fabulosa sin dolores haciendo gimnasia y una calidad de vida impresionante.

Sergio, mi yerno, tenía fuertes dolores de espalda y llegaron a decirle que tenia esclerosis múltiple. Fuimos a ver a nuestra “ANGEL” y todo era un problema de columna que se soluciono con su inmejorable técnica.

El pequeño Marti se retraso al nacer y la Dra ANGELA le movió a Arantxa y el chiquillo mas hermoso nació de maravilla.

Isa Alex y yo, Mercedes también pasamos para que nos ponga a punto.

DOY GRACIAS A QUIEN SEA PORQUE SIN “NUESTRO ANGEL” TODO HUBIERA SIDO DIFERENTE.