Hace dos años, tenía una hernia discal lumbar muy grande y dolorosa. Una semana antes de operarme conocí a la Dra. Angela Olaru a través de una amiga.
Me dijo que en mi caso la micro cirugía era la mejor opción pero que íbamos aprovechar la semana haciendo un tratamiento intensivo (dos veces al día, cada día) para reacondicionar toda la columna eliminando todas las subluxaciones (bloqueos) vertebrales relajando la musculatura paravertebral y reequilibrando todo el cuerpo.
Mi experiencia fue extraordinaria.
Debido a este tratamiento intensivo el tiempo de la operación se redujo a la mitad. Según el médico que me operó ni siquiera hubo sangre, la hernia prácticamente le salió sola.
Pude marcharme a casa después de solo un día en el hospital. Fue tan excepcional que el cirujano quiso conocer a la Dra. Olaru.
Después de recuperarme de la operación, sigo regularmente el tratamiento quiropráctico periódico para mantener la ‘higiene’ de mi columna con efectos positivos sobre todo el organismo.
Una de las experiencias más asombrosas para mí, que prácticamente había perdido el olfato debido a estados agudos de alergia durante mi adolescencia, fue que un día al salir de la consulta, de repente, fui capaz de volver a “oler el aire de Sant Cugat”!
Aprendí que hay que cuidar la columna, donde pasa la médula y están las conexiones con todos los órganos vitales, igual como ir al dentista o al ginecólogo.
Ahora presto más atención a mí misma, escuchando más los señales de mi cuerpo, hago ejercicios para reforzar la columna y, cuando noto alguna señal de alarma, no espero el dolor para ir a la consulta.
Yo he recomendado el cuidado quiropráctico a muchas personas y seguiré haciéndolo con plena convicción.